El lema que ha utilizado una cadena de supermercados para explicar porqué empiezan a poner freno al despilfarro de bolsas de plástico en sus establecimientos, no puede ser más explícito.
Ha coincidido con la alarma dada por los científicos, que nos cuentan que el deshielo del Ártico a causa del cambio climático está siendo mucho más rápido de lo que esperaban.
Son dos ejemplos bien visibles de las consecuencias de nuestro modo de vida:
La despreocupación con la que se utilizan innecesariamente miles de millones de bolsas es un claro ejemplo de cómo desaprovechamos los recursos que la Naturaleza nos brinda y se los devolvemos, además, convertidos en residuos.
Nuestro excesivo consumo de energía, ha hecho que a base de quemar petróleo, carbón y gas, hayamos transformado la composición de la atmósfera hasta el extremo de cambiar el clima en todo el planeta. Paradójicamente, son las poblaciones de los países empobrecidos quienes más están sufriendo las consecuencias.
Os invitamos a reflexionar sobre qué podéis hacer para:
Reducir el consumo, evitar el usar y tirar, generar menos desechos…
Ahorrar energía, no malgastarla, utilizarla de forma eficiente…
Contribuir al proceso de toma de conciencia colectiva, para que juntos seamos capaces de acelerar el cambio hacia una forma de vida que respete la Vida.
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