SERCADE, la obra social de los Hermanos Menores Capuchinos de España, cubre con la obra de la artista navarra Iruña Comenzana las fachadas de la céntrica basílica de Jesús de Medinaceli en Madrid
Una instalación de 20 pinturas de grandes dimensiones cubre desde el pasado mes de marzo la Iglesia de Jesús de Medinaceli para invitar a quienes se acerquen, sean creyentes o no, a reflexionar sobre la cuestión migratoria.

Vórtices, la obra de la artista navarra Iruña Comenzana López (Pamplona, 1967), pone el foco en el momento de máxima angustia, el que se da con la pérdida de vidas en el mar. La instalación consiste en 20 paneles gigantes que cubren la fachada y paredes adyacentes de esta céntrica basílica madrileña. Las pinturas muestran masas infinitas de agua de mar que envuelven y cubren cuerpos, algunos sin vida, otros siendo rescatados, o rescatando a otros cuerpos. Cada una de ellas refleja el instante de máximo abandono y sufrimiento, donde el cuerpo se convierte en límite de los anhelos.
“He querido reflejar un momento de intimidad en el que la persona se enfrenta a su vida y su existencia, contraponiéndolo con ese color azul que para nosotros es el de un mar de disfrute y vacaciones, y que para las personas migrantes puede ser el momento final,” señala Comenzana.
Una muestra valiente
La artista destaca la valentía de los frailes a la hora de apostar por una artista, mujer y desconocida en Madrid, para llevar un tema tan importante a la calle a través de una obra muralística, que es como tradicionalmente se han trabajado las grandes gestas humanas. “Al final de este proyecto acabé colocando el torbellino, el vórtice que todo se lo traga y en el que nos sumimos todos,” añade.
Para Benjamín Echeverría Martínez, provincial de los Capuchinos de España, la obra Vórtices invita a la reflexión espiritual y a la acción de los ciudadanos, cristianos o no, ante uno de los cambios más profundos en nuestra sociedad.
“La cuestión migratoria es sin duda uno de los temas fundamentales de nuestro tiempo y al que tenemos la obligación moral de responder. En nuestro caso está claro, queremos estar cerca de aquellos que sufren y acompañarles en la construcción de vidas más justas,” señala el religioso.
A ellos se une Xabier Parra Berrade, director de la obra social de los capuchinos, que explica cómo el equipo de SERCADE quiso reflexionar sobre ese instante de soledad en el trayecto de un migrante.
Ese momento, dice Parra, que no define al viaje personal de todas las personas que acompañan desde su servicio, pero que sí que sirve como punto de partida para plantearse el futuro de las migraciones.
“Somos una entidad de personas acompañando a personas, de personas que viven y conviven, y que quieren verse proyectadas, soñarse en futuro… pensarse también en el mañana”, afirma Parra.
Aporofobia
Ese es uno de los temas de la obra de Iruña, la cuestión de la aporofobia, el rechazo al pobre, y de cómo hemos “construido sociedades que abandonan vidas en sus fronteras, en las periferias, negándoles incluso el derecho a soñar, a tener anhelos”.
La instalación, provisionalmente, se podrá apreciar desde el 6 de marzo hasta el 17 de abril. Coincidiendo con ella, SERCADE tenía previsto organizar una serie de conferencias que pretendían responder desde la mirada académica, cultural, filosófica y periodística a la pregunta de qué cuerpos, entendidos como el anclaje físico al mundo, importan y de qué manera.
Contaban las jornadas, que tendrán que posponerse debido al estado de alarman, con periodistas expertos en migraciones, el profesor y escritor africanista Mbuyi Kabunda, los teólogos Pepa Torres y Fidel Aizpurúa, el ex ministro y catedrático de filosofía Ángel Gabilondo o la poetisa afrogalega Artemisa Semedo. Estas charlas abordarán, cuando puedan realiarse, entre otras la cuestión de cuáles son los otros mares metafóricos que, más allá de los evidentes, cubren de incertidumbre y ahogan los gritos de las fronteras.
Sobre SERCADE
La Asociación Servicio Capuchino para el Desarrollo y la Solidaridad es la entidad sin fines de lucro que, desde 1998, asume la tarea social de la congregación católica Capuchinos de España.
En la actualidad, SERCADE lleva a cabo 43 proyectos, la mayoría en España, pero con participación en acciones de cooperación al desarrollo en Venezuela, Ecuador, México y otros países.
Una de las líneas de trabajo prioritarias para SERCADE ha sido y es el trabajo con migrantes. SERCADE gestiona un centro de acogida, una residencia y un programa de inserción (en formación y empleo) dirigidos a la población subsahariana. El centro de acogida ‘Programme Afrique’, que abrió hace cinco años para acompañar a los migrantes y solicitantes de asilo tras la llegada a territorio nacional, atiende a una media de 80 personas al día y lleva, desde su apertura, acompañando la incertidumbre de más de 1.500 migrantes