
Esta imagen es de Atenas. Algunos de los edificios que quedaron vacíos cuando sus habitantes fueron expulsados de sus viviendas y sus negocios por las políticas de “austeridad” impuestas por la UE cobijan ahora a otras personas, también expulsadas de sus negocios, sus trabajos y sus hogares por la guerra. Unas y otras son víctimas de violencias gestadas fuera del alcance de su capacidad de decisión por personas que, confortablemente instaladas en sus mansiones, sus poltronas y desde luego sus negocios, más bien se enriquecen con esas austeridades y esas guerras.
Alguien hizo este graffiti en una de esas paredes atenienses, “dedicado a los pobres y los sintecho de aquí y de todo el mundo”. Un graffiti que es un grito en el muro. ¿Quién dijo aquello de “si las piedras hablaran…”? Vaya si hablan, solo necesitan, como las personas, oídos que escuchen.
Unos construyen muros; otros, gritos desde las paredes. Afortunadamente, hay gente p’a tó.
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