Cuando hablamos de desarrollo humano nos referimos a la creación de capacidades humanas y mecanismos de participación activa para que las personas puedan mejorar sus vidas. De este modo, el crecimiento económico es un medio importante para el logro del desarrollo humano, pero no es el único. Tampoco es el fin último.
Lograr el desarrollo humano para todas las personas no es un sueño sino un objetivo realizable, en opinión de los expertos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que han elaborado el informe correspondiente a 2016, presentado recientemente. El informe, titulado “Desarrollo humano para todos”, tiene como telón de fondo acuerdos internacionales tan importantes como la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible y el Acuerdo de París para el cambio climático, poniendo el acento en la necesidad de que el desarrollo sea universal y una realidad para todas las personas. En definitiva, que “nadie se quede atrás”, como ya se señalaba en la Agenda 2030.