Los derechos humanos de las personas que viven en las zonas petrolíferas del delta del Níger han sido minados por compañías petroleras a las que el gobierno de Nigeria no ha hecho rendir cuentas.
La industria de extracción de crudo es responsable de la contaminación generalizada del entorno del delta del Níger. Los vertidos de petróleo y de desechos y la quema de gases se han hecho endémicos. La contaminación ha dañado fuentes vitales de subsistencia, especialmente en la agricultura y la pesca, hundiendo aún más en la pobreza a muchas personas.
Urgen una limpieza integral de las áreas contaminadas del delta del Níger y remedios efectivos para las personas y comunidades afectadas.
¡Actúa! Firma la petición de Amnistía Internacional.
- Pasar de las tinieblas a la luz – Carta Abierta a la Conferencia Episcopal Española - 1 de febrero de 2022
- ¿Dónde estaban las mujeres de Greenpeace? - 13 de enero de 2022
- Sobre risas, fragilidades y respiraciones - 12 de enero de 2022